Modernism and Its Merchandise. The Spanish Avant-Garde and Material Culture, 1920–1930 by Juli Highfill (review)

Reproduciendo, en cierto modo, el carácter fragmentario de la estética vanguardista, Juli Highfill ofrece al lector un valioso recorrido por algunos de los momentos más relevantes en la producción artística española durante la década de 1920, años que contemplan el apogeo y comienzo del declive de la vanguardia peninsular. Su trabajo tiene como hilo conductor el estudio de mercancías, artilugios mecánicos y cosas que pueblan la obra de los artistas de vanguardia, obra con la que pretendían replicar su propia experiencia de actores en la nueva civilización urbana. Partiendo de la centralidad del objeto, y su consiguiente transformación metafórica en producto artístico, Highfill explora una serie de episodios, momentos y obras que alcanzan dimensión emblemática; en ellas, se cifran cambios fundamentales que la vanguardia trajo consigo tanto en el territorio de la vida como en el del arte. Como señala la autora en su lúcida introducción, los vanguardistas españoles se propusieron aprehender el mundo material de su época—transmutado por el comercio, los avances mecánicos y la tecnología—para interpretarlo mediante una visión transformadora de la actividad poético-artística bajo el impulso de una renovada vitalidad. Su estudio se concentra en una relevante reflexión sobre las consecuencias que la nueva cultura material tiene en el desarrollo de la modernidad española, con los consiguientes efectos derivados de una percepción novedosa de la realidad. Por su enfoque, Modernism and Its Merchandise resulta, en su conjunto, un trabajo innovador. A pesar de que algunas obras estudiadas, como La deshumanización del arte, Hélices o Doña Inés (de Ortega y Gasset, Guillermo de Torre o Azorín, respectivamente), han recibido mucha atención crítica, la perspectiva de Highfill ofrece ángulos interpretativos de innegable interés. Las obras de estos autores, más la de Gómez de la Serna, Francisco Ayala, Pedro Salinas, Corpus Barga y la colaboración cinematográfica de Luis Buñuel y Salvador Dalí en Un chien andalou (1929) y L’Age d’Or (1930) se engarzan con gran efectividad mediante el topos vanguardista de la mercancía (ya sea máquina o ropa) para ofrecer al lector una visión altamente estimulante de las proyecciones poéticas vanguardista en su conexión con la dimensión material.

Este recorrido por el vanguardismo español se organiza en seis capítulos. En el capítulo uno, titulado “Ortega’s Apples, Ramón’s Bottles”, Highfill analiza la renovada atención moderna hacia el bodegón o naturaleza muerta a la luz de los debates coetáneos sobre la naturaleza del gusto artístico. Interpreta las meditaciones de Ortega en sus tratados de estética sobre la fruta, y otros objetos reproducidos en innumerables bodegones (desde Cézanne a Picasso), como claro ejemplo de la defensa que el filósofo y mentor (al menos en sus inicios) de los jóvenes vanguardistas hace de la forma y la estilización de un arte desprovisto de sentimentalismo decimonónico. Por otro lado, y examinando el ensayo “Botellismo” (dentro del libro Ismos) de Ramón Gómez de la Serna, considera Highfill las botellas y otras piezas pertenecientes a la esfera cotidiana de la comida y bebida (tan presentes en las tertulias de la época), como metáforas materiales y símbolos de una experiencia más sensual que la orteguiana de la realidad externa. Muy sugerente resulta en esta sección la conexión del concepto de deshumanización con el movimiento purista europeo promovido por Amédée Ozenfant y Le Corbusier. El capítulo dos, “Merchandise on Display”, explora con agudeza la centralidad de la mercancía dentro del motivo del escaparate, objeto/espacio sobre el que se proyecta el deseo de posesión del fetichismo libidinoso...