Camino de ronda (review)

Arizona Journal of Hispanic Cultural Studies 269 Camino de ronda Tusquets Editores, 1998 Por José MarÃ-a Mico La presente colección de poemas es el tercer poemario del barcelonés José MarÃ-a Mico. Camino de ronda se divide en cinco secciones de siete poemas. La primera parte se titula "El aire en las afueras" y comienza, "Tomad, aquÃ- está el mundo, /... Os lo doy con el agua, con la tierra, / con el fuego y el aire" (15). En las selecciones que vienen después, estos cuatro elementos telúricos, el agua, la tierra, el fuego y el aire se revelan como aspectos centrales. De hecho, llegan a describirse como entes que desean transformarse : "El agua busca nudos; /... Quiere el rÃ-o ser canto silente y duro" ( 19), "la tierra / quiere afinarse y desentumecerse" (21), "El fuego busca el aire, /... Quiere dejar de ser / el filo tremolante que extingue los renuevos ," (23) "El aire... / quiere ser viscera y materia, / ser el sólido pomo, no la esencia que escapa" (25). El retrato del mundo natural con toda su variedad se muestra como el enfoque de esta primera parte. La segunda sección, "Recinto amurallado ," expande la temática del poemario al ofrecer unas viñetas poéticas que dan una visión de la vida pueblerina de los labradores de campo. El trabajo eterno de sembrar y trabajar la tierra, la fecundidad natural y humana, y la noción del tiempo y el espacio como murallas se presentan como las ideas de mayor relieve. La poesÃ-a de "Vuelta de correo" se diferencia con la de las secciones anteriores por su Ã-ndole casi conversacional. En esta parte, la voz poética le describe las experiencias de su visita (camino de ronda) a su pueblo de nacimiento a un amigo. Estas selecciones contrastan la vida rural con la vida urbana y discuten la relación entre el ser humano y el espacio en que nace, vive y muere. Esto culmina al final de la sección cuando el hablante poético le informa a su interlocutor: "Olvidaba decirte que esta casa / redil de algunas almas desvalidas, / es también para ti" (63). "Barrio las eras" recuerda la juventud de la voz poética a través de memorias de la cosecha y la labor agrÃ-cola. Mientras el hablante reflexiona sobre sus años tempranos , subraya algunos de los primeros encuentros entre el mundo de su juventud y el de su madurez, "Y era en aquel camino / de ronda donde un coche o una mujer cualquiera llegaban de otro mundo / y todo se sabÃ-a sin decirlo" (71). Está claro que el ambiente que experimentaba de joven es distinto del que conoce como adulto. La paz y sencillez del campo surgen de nuevo en el último poema de la sección cuando se vuelve a tomar el hilo presentado en la primera selección del poemario; "Salgo al camino que conduce al campo. / El agua forma nudos, / la tierra se confunde con el fuego, / el fuego busca el aire / y el aire, empedernido , / ya no rompe el silencio" (81). Con la repetición de estos cuatro elementos, su importancia se mantiene presente a lo largo de la obra, hecho que se comprueba en la última sección. En "Camposanto" se hace patente que ahora la juventud es solamente una memoria para la voz poética. Mientras recuerda sus familiares fallecidos, el ubicuo agua, tierra, fuego y aire parecen impasibles frente al fluir temporal. A la vez, el hablante, al haber regresado a sus orÃ-genes, siente haber cumplido una especie de peregrinación en la cual se despide y honra a sus antepasados. La colección termina, "Tú, caminante, lee y considera / esta victoria pÃ-rrica de quienes, / por estar muertos, ya no son mortales" (99). Mediante el poder de la memoria y la 270 Arizona Journal of Hispanic Cultural Studies expresión poética, el poeta parece percibir una trascendencia más allá del tiempo y espacio terrenal. A través de esta obra las imágenes hacen brillar el campo rural que el poeta describe con un lenguaje preciso. Además del cuidadoso empleo del idioma, el uso...