Periodismo, crimen, misoginia: El año en México

Journalism, Crime, Misogyny: The Year in Mexico

There were two notable biographical books this last year: El vendedor desilencios by Enrique Serna and El traidor by Anabel Hernández. The authorSerna undertook a biographical novel of a famed Mexican journalist, andHernández is a journalist who writes the story of the first-born son of a majordrug trafficker. A thread of violence weaves these works together, along withBeatriz Barros Horcasitas's autobiography and a documentary film on MariselaEscobedo and her search for her daughter's assassin. These differentapproaches toward life narratives allow a long-term perspective on theperpetration and experience of violence in general, and against women inparticular, in twentieth-century Mexico, and on how resistance and collectiveprotest are currently changing both perception and action.

Dos libros biográficos destacaron este último año: El vendedor de silencio, de Enrique Serna (2020) y El traidor, de Anabel Hernández (2019). El primero trata de la vida de un periodista importante a mediados del siglo XX; el segundo trata de un narcotraficante importante en los últimos veinte años. El tema de la violencia recorre estas distintas biografías, y otras que mencionaré más adelante. El conjunto muestra, en particular, la experiencia y la cambiante percepción de la violencia hacia las mujeres.

Serna escribe acerca de Carlos Denegri (1910–1970), el periodista mexicano más conocido de toda Latinoamérica, según obituario del New York Times ("Mexican Newsman"). Otros periodistas recientemente le han dedicado calificativos menos honrosos: corrupto ("Learning from Carlos Denegri"), intoxicado de poder (Rodríguez García) o peligroso (Mastretta). Para elaborar su novela biográfica, Serna buscó indicios del paso de Denegri en archivos, en centenares de sus textos periodísticos y en testimonios de sus contemporáneos. No obstante la investigación histórica, Serna es escritor y, seguramente por ello, confió en recurrir a la ficción para mejor contar la vida de su biografiado; como él mismo dice, aludiendo a Balzac: "el novelista no aporta las pruebas de las verdades que intuye (sólo percibe su reflejo en otra conciencia), pero la ficción le da mejores armas para entretejer el destino individual con el colectivo" (483).

El inicio de El vendedor de silencios establece un paralelo con la novela de Carlos Fuentes, La muerte de Artemio Cruz. En ambos casos, el lector los topa por primera vez en el momento en que los abruma el deterioro físico y pierden confianza en su fortaleza. A Denegri lo encontramos también admirando desde la ventana de su oficina a una mujer que acompaña a sus hijos al parque, instante en que inicia una cadena de sucesos que terminarán en su muerte violenta a manos de quien entonces es una atractiva extraña para él. La trama central es la de una trágica historia de amor.

En el interior de esa historia encontramos anidada la biografía. Mediante el simple recurso de cortes y flashbacks durante una conversación con un viejo conocido que ahora es su antagonista, Serna cuenta la vida de Denegri. Nuevamente se antoja el paralelismo con Artemio Cruz. Venido a menos, la fortuna de Denegri cambia por un golpe de suerte. Su madre, una artista de cabaret argentina, se casa con un hombre bien posicionado en el nuevo régimen mexicano, emanado de la revolución. Posteriormente, el joven Carlos, imbuido del idealismo de la revolución en México, viaja con cartera diplomática a España, envuelta entonces en la guerra civil que terminó con la derrota del gobierno republicano. Ahí conoce esa personalidad dividida que lo habita: una parte propensa a la juerga, la ambición y el poder; la otra, observadora y crítica, de buena pluma y capacidad sintética. Esa será la personalidad que lo lleve a la cima del periodismo mexicano en la posguerra y lo convierta en factor de poder para políticos, de quienes acumula su ropa sucia para luego vender su silencio y en objeto del deseo para mujeres, a...