Hacia el asentamiento del Español para las Profesiones y Propósitos Específicos

Respuesta 2 a "Spanish for the Professions and Specific Purposes: Curricular Mainstay"

En este ensayo magistral, "Spanish for the Professions and Specific Purposes: Curricular Mainstay", basándose en la evolución histórica del Español para las Profesiones y Propósitos Específicos (EPPE) de los últimos 30 años, Michael Scott Doyle apuesta por el florecimiento y asentamiento de este campo como uno de los pilares curriculares paradigmáticos del futuro en programas de español. Doyle enfatiza que el éxito de los diseños curriculares de EPPE dependerá de su flexibilidad y relevancia constantes, de su continua evolución y adaptación en respuesta a las necesidades de la sociedad global del momento. Partiendo de esta acertada premisa, proponemos además reflexionar de forma émica sobre otras consideraciones de índole crítico necesarias para que EPPE avance y alcance la "normalización" disciplinaria que requiere (Lafford 2012; Lafford, Abbot y Lear 2014; Long 2013), y al mismo tiempo poder reclamar y defender el papel fundamental de la humanidades en la educación universitaria (José 2014). El campo de EPPE disfruta de un presente importante, pudiéndose predecir un futuro, cuando menos, interesante. A medida que la demanda de elementos, cursos y programas de EPPE (de grado y posgrado) continúe aumentando, deberá existir una proliferación paralela de investigación en la acción que documente, densifique y aporte "granularidad" (Doyle 2013, 2014) al desarrollo de modelos curriculares basados en la investigación de campo y en la práctica. Para que esto ocurra, será crucial que profesores de EPPE de todos los rangos consideren llevar a cabo investigación en la acción en el aula, así como otros estudios científicos para ampliar los recursos bibliográficos y pedagógicos existentes, y para mejorar las prácticas educativas (Lafford 2012, Sánchez-López 2012).

Además, deberemos reflexionar sobre las diferentes corrientes curriculares en EPPE que se hoy plantean, para así escoger la que mejor se adecúe a las necesidades de nuestra propia situación curricular, institucional y comunitaria del momento, tales como: 1) la integración de elementos de EPPE en el programa de español general por todo el diseño curricular de principio a fin; 2) la creación de cursos o programas de EPPE separados o paralelos a los de español general;3) la integración uniforme y ecológica de las dos anteriores; y/o 4) la búsqueda de los elementos comunes entre EPPE y el Español para Fines Generales (en lugar de las diferencias) para diseñar modelos curriculares que se centren en destrezas de liderazgo aplicables a cualquier profesión. Las instituciones de educación terciaria, y en particular los departamentos de idiomas, deberán otorgar a EPPE el lugar que merece en términos de reconocimiento y financiación para poder reclamar el valor de las humanidades dentro del currículo y de la educación universitaria. Por otra parte, los programas de formación de profesorado en las facultades de pedagogía y en los programas de posgrado de español deberán invertir tanto en formación del profesorado como en entrenamiento de métodos de investigación multimodales para así romper con el sistema autodidacta existente (Lafford 2012; Long 2013; Sánchez-López 2012; Ruggiero 2014). En suma, departamentos de idiomas universitarios más tradicionales deberán reflexionar de forma émica y mirar hacia el futuro de manera proactiva y flexible al planificar diseños curriculares a corto y largo plazo con el fin de atender las demandas y necesidades de estudiantes, comunidad, y sociedad global. Por último, EPPE no conseguirá instituirse como disciplina universalmente reconocida y valorada a menos que se establezca una estrecha comunicación y colaboración entre educadores, investigadores y organizaciones profesionales a nivel internacional. Solo abordando todas estas consideraciones lograremos asentar a EPPE en el centro del currículo de...