Abstract

En “What is the Contemporary?”, Giorgio Agamben identifica cierta desconexión, cierto anacronismo que hace que los que él llama “verdaderamente contemporáneos” sean capaces de percibir mejor su propia época, aunque no su lado luminoso, sino su lado oscuro, ancestral (40). La contemporaneidad está marcada así por lo arcaico, de modo que la relación que se establece con el presente es arqueológica. El contemporáneo, en suma, es quien puede superar la linealidad histórica y pensar el tiempo en relación simultánea con otras temporalidades. Siguiendo a Agamben, el presente trabajo propone que nuestra contemporaneidad literaria podría definirse mediante tres aspectos: primero, por la elaboración de un mapa cognitivo trazado a partir de experiencias particulares; segundo, por la invocación de lo presente a través de referencias a momentos históricos específicos; y tercero, por la presencia de un archivo mediático visual/audiovisual que permite construir la memoria de un sujeto, uno que muchas veces aspira a confundirse con el autor o que utiliza la primera persona singular para dar cuenta de cierto grado de intimidad o subjetividad en conflicto o en construcción. Para ilustrar estos aspectos, se propone un breve análisis de pasajes representativos de las obras de Alejandro Zambra y Pola Oloixarac.

pdf

Share