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La frontera en el cine mexicano más actual. El jardÃ-n del Edén: culturas locales vs cultura global Concepción Bados-Ciria University of Washington La extensa lÃ-nea fronteriza que separa México de Estados Unidos sugiere y ofrece múltiples imágenes registradas, incesantemente, en los diversos medios de representación. Las artes visuales, principalmente la fotografÃ-a y el cine, han corroborado en los últimos años el retrato más extendido de esta frontera: un espacio en el que, a pesar de las evidentes interacciones económicas culturales y humanas, se mantiene una diferencia substancial que persiste como afirmación de una identidad multicultural local. Esta emerge como resistencia frente al podet homogeneizante del fenómeno globalizador que arrasa por doquier y, principalmente, desde los medios de comunicación de masas que lanzados desde Estados Unidos, producen un particular y especial impacto en el vecino paÃ-s del Sur. Como es lógico, los intelectuales y artistas mexicanos han venido emitiendo y expresando las más diversas y polémicas opiniones respecto a los cambios y novedades que se suceden, dÃ-a tras dÃ-a, en este extenso y conflictivo espacio fronterizo como consecuencia del demoledor impacto de la globalización. Desde el medio cinematográfico, MarÃ-a Novaro se hace eco a través de EljardÃ-n del Edén de una problemática planteada y trarada muy especialmente, tanto en vÃ-speras como después de la firma delTratado Arizona Journal of Hispanic Cultural Studies Volume 1, 1997 44 Arizona Journal of Hispanic Cultural Studies de Libre Comercio, por numerosas voces provenientes, principalmente, de los sectores intelectuales mexicanos más crÃ-ticos y liberales. Como ejemplos: el cronista Carlos Monsiváis, los escritores Héctor Aguilar CamÃ-n, Elena Poniatowska y el "performer" Guillermo Gómez Peña, entre otros, se han manifestado en torno a la penetrante influencia de "lo estadounidense globalizador" en México, que repercutirÃ-a en detrimento y menoscabo de "lo local mexicano".1 Frente a la actitud sarcástica, provocadora y autocrÃ-tica, en particular de Monsiváis y Gómez Peña, MarÃ-a Novara propone una visión cinematográfica dialogante y abierta, tanto del espacio fronterizo tijuanense como de la problemática chicana. Para ello propone un acercamiento feminista inquisitivo a la vez que conciliador, aunque no menos crÃ-tico, cuando se enfrenta a situaciones de injusticia, desigualdad o abuso por parte de la economÃ-a y la cultura dominantes. A través del análisis de El jardÃ-n del Edén, me propongo demostrar cómo el cine mexicano más reciente asienta, ptecisamente en el largo espacio fronterizo con Estados Unidos, la afirmación de culturas locales frente al "paisaje global" propuesto desde las grandes corporaciones que mueven los hilos de la comunicación mundial.2 Mucho se ha escrito en los últimos cinco años acerca del proceso globalizador que, de acuerdo a David Morley y Kevin Robins en Spaces of Identity, queda asociado con una nueva dinámica de rehcalización, la cual conlleva complejas relaciones entre el espacio global y su homólogo local. La lucha por un espacio local en el inmenso universo global, junto con una nueva recuperación de la arquitectura urbana y un nuevo medio ambiente son algunas de las preocupaciones propias de la postmodernidad—aseguran Morley y Robins—sugierendo además, que la afirmación de las culturas locales refleja profundos sentimientos e Ã-ntimas emociones derivadas de la inscripición de las vidas humanas y de ciertas identidades en un espacio y un tiempo determinados. Como si de un rompecabezas se tratara, estos dos expertos en comunicación, definen la globalización como un nexo entre lo local y lo global, o sea, como un proceso recÃ-proco que vendrÃ-a a insertar una multiplicidad de aspectos locales en el grandioso paisaje del nuevo sistema global (Morley y Robins 116-117). En la lÃ-nea de estas propuestas, cualquier espacio fronterizo es, indudablemente, el más idóneo y propicio para la puesta en práctica del proceso globalizador, por las posibilidades que contiene en cuanto a intercambio, mobilidad y permeabilidad no s...

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