Disorientations: Spanish Colonialism in Africa and the Performance of Identity (review)

En este libro se explora, de manera exhaustiva, la performación de la identidad española vis-à-vis el colonialismo español en África desde finales del siglo XV hasta el siglo XX y, en fechas más recientes, la inmigración magrebí y subsahariana. Por medio de una enriquecedora aproximación multidisciplinar, Martin-Márquez analiza con detalle la esencial implicación, en la construcción de la identidad nacional, de las representaciones culturales de África (en este caso, de Marruecos y Guinea Ecuatorial) y los africanos. El punto de partida es un topos de la historiografía: para España, el “Oriente” no es una mera exterioridad, sino parte de la constelación de fuerzas que configuran su propia identidad. La tensión entre esas fuerzas, causante de las “desorientaciones” experimentadas por los españoles al construir su identidad nacional, se formó, en palabras de la autora, durante la first-wave nation building, vinculada a los eventos desencadenados por la conquista de Granada en 1492, la expulsión de los judíos y la población musulmana, la conquista de América y los estatutos de limpieza de sangre; con la Ilustración surgió la second-wave nation building, en la que se negoció una identidad nacional unificada en relación con una nueva mirada al pasado andalusí, así como con la identidad/alteridad del español con el “moro” reactivada y acentuada por el africanismo español de los siglos XIX y XX y por la administración política y el control militar del protectorado español de Marruecos.

En la introducción se establecen las tesis, la metodología y el aparato teórico del libro, básicamente las teorías de B. Anderson, Gellner, Duara, McClintock y Bhabha sobre “nación”, “colonialismo” y “performatividad”. El primer capítulo describe las dos fases mencionadas de la performación de la identidad nacional; se investiga el papel desempeñado en dicha performación, durante la primera fase, por la racialización del “otro” (judíos y musulmanes) y su expulsión, y, durante la segunda, por la revalorización del pasado andalusí (que se manifiesta en la restauración de la Alhambra, la publicación institucional de libros sobre monumentos nacionales, y el orientalismo literario y artístico presente en autores románticos y en novelas históricas), el arabismo académico, el colonialismo y el africanismo. El segundo capítulo se centra en instituciones (Museo Nacional de Antropología, Revista de Antropología, Sociedad Antropológica Española) y figuras (Manuel Iradier, Ángel Ganivet) del siglo XIX capitales en la articulación del reconocimiento de la alteridad del yo. En el tercero, Martin-Márquez estudia representaciones literarias y artísticas de la Guerra de África de Pedro Antonio de Alarcón, Benito Pérez Galdós y Marià Fortuny, cuya producción de identidad nacional se caracteriza por las “ansiedades” generadas al enfrentarse sus autores a cuestiones de religión, género y raza. Los capítulos 4 y 5 analizan con minuciosidad y rigor un amplio corpus literario (v.g. Isaac Muñoz, Luys Santa Marina), periodístico (v.g. Carmen de Burgos), memorialístico (v.g. Francisco Franco) y filmográfico (v.g. Romancero marroquí, La canción de Aixa, Cristo negro) creado a propósito de las guerras hispano-marroquíes, del protectorado español de Marruecos y, en menor medida, de la ocupación española de Guinea Ecuatorial. Por último, el capítulo 6 y el epílogo ofrecen, mediante una lectura atenta de acontecimientos históricos y documentos escritos (v.g. Jo també sóc catalana) y fílmicos (v.g. En construcción, Lalia), una aguda y matizada interpretación de la convivencia actual entre los españoles y los inmigrantes procedentes de Marruecos y Guinea.

Si uno se...