Abstract

This article argues that the orientation of art toward an international market during Cuba’s Special Period has resulted in a new post-utopian aesthetics of the everyday and allows for greater possibilities for social critique in Cuban cinema. Although the international market imposes certain constraints on Cuban filmmakers, which they didn’t have to contend with when they received state subsidies, their ability to negotiate between two masters, the market and the Cuban state, has afforded them more autonomy than they previously enjoyed. Fernando Pérez’s film Suite Habana (2003), which follows a day in the life of ordinary Habaneros, provides a daring and realistic glimpse into the everyday lives of Cubans struggling to survive in the midst of economic crisis. Suite Habana represents a new aesthetic that emerged in the Special Period of post-utopian Cuba, one that focuses on everyday concerns rather than on monumental historical events or narratives that justify the Cuban Revolution. Neither antirevolutionary nor blithely prosocialist, Pérez’s post-utopian view helps us to understand how Cubans are dealing with the transition from a socialist Fidelista state to something else.

Resumen

Este artículo propone que la orientación del arte hacia un mercado internacional durante el período especial ha dado lugar a una nueva estética posutópica de lo cotidiano, la cual permite más posibilidades para una critica social en el cine cubano. Aunque el mercado internacional impone ciertas restricciones en los directores cubanos, que no existían cuando recibían subsidios del estado, su capacidad de negociar entre estos dos patrones, el mercado y el estado cubano, les ha dado a los cineastas una mayor autonomía que la disfrutada antes. La película de Fernando Pérez, Suite Habana (2003), que relata un día típico en la vida de los habaneros, nos da una visión audaz y realista de la lucha cotidiana para sobrevivir en medio de una crisis económica. Suite Habana representa una nueva estética que emerge durante el período especial, una estética que se enfoca en los asuntos cotidianos en vez de en los eventos históricos monumentales o en narrativas que justifican la revolución cubana. Ni antirevolucionario, ni superficialmente socialista, la visión posutópica de Pérez nos ayuda entender cómo los cubanos están manejando la transición de un estado socialista Fidelista a algo diferente y desconocido.

pdf

Share