In lieu of an abstract, here is a brief excerpt of the content:

Latin American Music Review 25.2 (2004) 195-215



[Access article in PDF]

De Violeta Parra a Víctor Jara y Los Prisioneros:

Recuperación de la memoria colectiva e identidad cultural a través de la música comprometida

Lo que más les pica a los periodistas y a los cuicos derechistas, es que estés [Jorge González] ganando buena plata. Eso no los deja dormir y te odiarán mientras vivas removiéndoles la conciencia cochina que tienen.
Marcelo,
fan de Los Prisioneros

A treinta años del Golpe Militar de 1973, podemos declarar que Chile, para lograr progresar como nación, se ha convertido en un "país amnésico" en donde aquéllo "que hemos alcanzado supone perder la memoria . . . y todo atisbo histórico" (Jocelyn-Holt 2000, 31). En este estudio analizamos la recuperación de la memoria colectiva e identidad cultural a través de la música comprometida, que ensalzó la candidatura de Salvador Allende y su arribo al poder en 1970. De hecho, en su último discurso a través de Radio Magallanes—y mientras el fuego de las armas se escuchaba en La Moneda, Allende se despide del pueblo y menciona la contribución de los cantantes de la "Nueva Canción". Al mismo tiempo, vaticina momentos trágicos para la historia chilena, esperando que su caída y sacrificio deje una huella indeleble en la subjetividad socio-política de futuras generaciones chilenas:

Me dirijo a la juventud, a aquellos que cantaron y entregaron su alegría y su espíritu de lucha; me dirijo al hombre de Chile, al obrero, al campesino, al intelectual, a aquellos que serán perseguidos, porque en nuestro país el fascismo ya estuvo hace muchas horas presente . . . Trabajadores de mi patria: Tengo fe en Chile y su destino. Superarán otros hombres el momento gris y amargo, donde la traición pretende imponerse. Sigan ustedes sabiendo que, [End Page 195] mucho más temprano que tarde, se abrirán las grandes alamedas por donde pase el hombre libre, para construir una sociedad mejor. ¡Viva Chile, viva el pueblo, vivan los trabajadores!
(Último discurso)

En un discurso visionario y en respuesta a la subversión militar del 11 de septiembre del 1973, las últimas palabras de Allende hacen eco e hincapié en el destino de muchos chilenos que fueron perseguidos, torturados y muertos por un ideal político. En un golpe militar sin precedentes en la historia cívica de Chile, el capitalismo, ayudado en gran parte por refuerzos y entrenamiento militar estadounidenses, derrotó el sueño socialista de Allende, lo cual significó un abrupto despertar de un arraigado idealismo político por parte de un sector de chilenos, quienes se sentían imbuidos por la música comprometida que se refería a un futuro igualitario, sin barreras sociales y con mayores oportunidades para la clase trabajadora.

Augusto Pinochet Ugarte, designado por Allende como comandante en jefe del ejército luego de la abrupta renuncia de Carlos Prats en agosto del 73, saltó de una relativa oscuridad a ser partícipe de uno de los capítulos más sangrientos de la historia chilena (Kandell 1974, 65). Luego de aparecer en las pantallas de televisión como integrante de la Junta Militar, fue declarado presidente de Chile con el título de Capitán General del Ejército. Pese a la violencia de la subversión militar, hubo muchos chilenos que celebraron la caída de Allende y ayudaron al régimen de Pinochet a instaurar cánones imperialistas o, lo que Fredric Jameson denomina, una cultura dominante, capitalista y posmodernista (1991, 4). Por ende, el régimen de Pinochet abrió las puertas al capitalismo e inauguró un sistema de libre mercado elogiado por los Estados Unidos. Por otra parte, su arresto en Inglaterra en 1998 por cargos de violaciones a los derechos humanos por parte del juez Garzón, "tuvo notables repercusiones no...

pdf