In lieu of an abstract, here is a brief excerpt of the content:

COMENTARIOS SOBRE FILMES_____________________________________139 redes del discurso, esto es, como inadecuada investidura libidinal o como penosa contracatexis. En las Comedias... se habla de amor porque no se puede amar o porque lo amado no se presenta. De cualquier forma se habla en vez de amar. Lo que Rohmer pone en escena en las Comedias... no es una reflexión ahistórica sobre los discursos y los modos amatorios universales, sino la rigurosa clasificación del amor insatisfecho en la sociedad actual, la antivida de burgueses y pequeños burgueses que, bajo la divisa de mayor libertad amorosa, terminan atrapados en relaciones parciales, en la soledad y en el narcicismo. Nadie como él ha sabido captar el carácter destructivo y tanático de las relaciones amorosas contemporáneas. Pero también, como contrapartida, nadie como él ha sabido aislar, a través de una pedagogía edificante de raíz cristiana, con alegría y humor, las figuras de la integridad. Por ejemplo, Rémi en Las noches... es señalado por Louise como posesivo y machista. Ella utiliza estos argumentos injustos para procurarse un espacio ambiguo (representado por el estudio en París), donde sin perder de vista lo amado pueda sentirse a la vez disponible para flirtear. Rémi, que cree en un amor absoluto, resentirá la situación. Instado por la propia Louise a buscar una reemplazante, lo impulsará a los brazos de otra mujer a la manera de una prueba de amor. Como en Las Damas delBosque de Boulogne de Bresson, la prueba demostrará la fragilidad de un amor sin reciprocidad. Luego de la confesión de Louise de haber dormido con otro, Rémi le revelará que él también la ha engañado. Con una diferencia: ha encontrado, gracias a Louise y al azar, la verdadera reciprocidad amorosa. La prueba de la integridad es la garantía de la búsqueda verdadera y es también la prueba de que la obra de Rohmer debe ser vista como una pedagogía que se sitúa, al menos por ahora, en el estadio ético. Pero, aunque faltan datos para pensar que, como Kierkegaard, Rohmer es un autor religioso, no por ello su obra está menos teñida de una auténtica voluntad de azar. Y el azar, no lo olvidemos, es la gracia por otros medios. [Retrospectiva Cine francés, Facultad de Artes, U. de Chile, 1990] LAS TRES CORONAS DEL MARINERO (Les trois couronnes du matelot, Raúl Ruiz, 1 983) Para orientarse en el cine de Raúl Ruiz, habría que considerar al menos tres cosas: El fundamento o la naturaleza de la imagen que Ruiz cultiva; la forma y la intención de su narrativa y, por último, los dispositivos y finalidad de su maquinaria cinematográfica. Con respecto a lo primero, es necesario comprender la imagen no como una mera constatación o designación de lo real, sino como un simulacro. En efecto no se trata en Ruiz del concepto platónico de Copia, sino de aquello que siendo copia de la copia, funciona por su cuenta. No se trata de representar lo que existe, sino de expresar las relaciones de lo existente no sólo en sus modos actuales sino también virtuales y posibles. Esto significa que la imagen no es una simple huella del real, 140_____________________________________________CRISTIAN SANCHEZ sino una constitución del real por su cuenta. Desmontar sus propiedades materiales es el primer paso analítico: las afecciones, pulsiones, percepciones, acciones, se reordenan separadas de sus soportes y actantes; en un segundo paso, sintético: de ello resultan relaciones, pensamientos y leyes de relación. Una representación de tercer grado que tiene por objeto englobar los niveles anteriores. Pero también es imagen puramente mental que ha roto las conexiones senso-motrices entre una acción y una situación, entre un efecto y una causa. Anulación del movimiento en pro de una brecha o intervalo donde el tiempo se inscribe. Ahora bien, desde sus primeros filmes Ruiz ha cultivado de modo creciente una imagen tiempo barroca, constituida por pliegues, repliegues y despliegues, con un exterior o fachada que no conduce al interior, siempre cerrado...

pdf

Share