Un siglo del ruiseñor, and: Guty Cárdenas: Leyenda o realidad, and: Guty Cárdenas: Su vida y sus canciones, and: Guty Cárdenas: Cancionero (review)

En el año 2005 hubiera cumplido cien años Augusto Cárdenas Pinelo, más conocido como Guty Cárdenas, si no hubiera perdido su vida en abril de 1932 con la edad de solamente 27 años, víctima de una bala perdida durante un tiroteo en un bar en la Ciudad de México. Las circunstancias trágicas, su muerte temprana y violenta, crearon pronto un mito de Cárdenas, aún sin ello es indiscutible, que había escrito no solamente una serie de canciones emblemáticas para la Trova yucateca, por ejemplo, Nunca, El caminante del Mayab o Rayito de sol, sino que también grabó entre 1927 y 1932 en los Estados Unidos más de 250 canciones—la mayoría con Colombia—lo que le llevó a ser uno de los primeros cantoautores mexicanos que lograron fama también fuera de las fronteras de su país. Hoy, a veces, se compara la influencia de Cárdenas en la música popular de México con la que tuvo Carlos Gardel en la música popular de Argentina. Desde luego, sin que la industria discográfica o la investigación académica hasta ahora lo haya tenido en cuenta de una manera comparable. RILM online lista bajo "Guty Cárdenas" solamente dos publicaciones (que ni están dedicadas a Cárdenas en particular sino a la Trova yucateca en general) y en discos modernos actualmente se pueden encontrar apenas dos docenas de canciones (CD El ruiseñor yucateco, Alma Criolla, 2000). Con motivo del centenario de su nacimiento han salido en México últimamente una serie de publicaciones sobre ese compositor e intérprete mexicano las cuales reducen esa carencia y facilitan por primera vez amplia información al público interesado.

El paquete multimedia publicado por la compañía discográfica mexicana Corasón bajo el título Un siglo del ruiseñor, conteniendo un audio CD, un DVD y un folleto, deja una impresión ambivalente. Por una parte, el audio CD con grabaciones originales de fines de los años 20 y principios de los 30, Cárdenas solo o a dúo con Chalín Cámara o Adolfo Utrera, es impresionante por la calidad de su restauración de sonido. Dicha restauración, realizada en Inglaterra por Nick Robins, resultó tan extraordinaria que da la impresión como si Cárdenas hubiera grabado en el estudio hace poco y no hace más de 75 años. Por la otra, el DVD producido por el Centro Universitario de Estudios Cinematográficos de la Universidad Nacional Autónoma de México bajo el título Sencillamente Guty es más que decepcionante por varias razones. La primera, la selección de personas entrevistadas es poco satisfactoria. Que se hayan entrevistado investigadores como Álvaro Vega o coleccionistas como Rafael de Pau es comprensible, pero que dar amplio espacio a compositores e intérpretes como Armando Manzanero, Coqui Navarro, Sergio Esquivel o Maricarmen Pérez aporta pocos nuevos conocimientos. Solamente dos de los entrevistados—Silvio Zavala Vallado y Carmen Marín—conocieron a Cárdenas todavía personalmente. En segundo, el material gráfico, fotos y documentos, presentado en el DVD fue filmado con muy mala...