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Arizona Journal of Hispanic Cultural Studies 301 obra consta de cuatro secciones de catoice o quince poemas con números romanos como tÃ-tulos. Las secciones contienen distintas voces femeninas provenientes de una sola familia de Chiapas. El poemario se inicia con la voz de Xunka, de doce años, una hija perdida; sigue con Pascuala, su madre; después continúa con Maruch, la abuela y, finalmente, teimina con Makal, la hija mayoi de diecisiete años que está embarazada. Como lo insinúa su tÃ-tulo, Thunderweavers /Tejedoras de rayos, cada voz se deja escucha ! fuertemente como si fuera un hilo que se entreteje en un guipil de la memoria, configurando asÃ- una sola voz colectiva que iescata su presencia en medio de un ambiente de sombra y de ausencia. A lo largo de esta colección, las cuatro mujeres de varias edades revelan recuerdos fragmentados y distorsionados con el fin de tratar de rescatar su propia voz y las voces de sus seres queridos para poder romper de esta manera un silencio fatal que se les ha sido impuesto poi los soldados. En medio del caos surgen imágenes contrapuestas de un mundo que antes conocÃ-an—lleno de maizales, cafetales, atole, nixtamal , luna, estrellas—yuxtapuestas con un mundo obscuro y violento, saturado de soldados, rifles, tanques militares, muertos y sangre. Sin embargo, en las cuatro secciones del poemario se mencionan guipiles, canastas de lana, o el acto mismo de tejer, que logra establecer un hilo común entre las mujeres que entrelazan sus voces y sus experiencias. Este guipil de palabras expone un testimonio colectivo que abarca color, textura, vida, mientras que cuenta una historia unificadora que perdurará para siempre. Por lo tanto, cada mujer testimonia lo que ve, lo que vio, lo que espeta vei. Las cuatro perspectivas femeninas ayudan a «configurar para los lectores el rompecabezas de la guerra en Chiapas. A lo largo del texto y de una manera dispeisa, se mencionan imágenes reales y conocidas en los periódicos como lo son los Zapatistas, San Cristóbal de las Casas, la Cruz Roja, ambulancias, la prensa, reporteros que eficazmente contribuyen al montage caótico. De hecho, el poemario sirve como un panorama profundo y apasionado de la trágica situación en México, visto de una manera sensible y humana, fuera del ámbito periodÃ-stico. Cabe observar que en la literatura mexicana la condición indÃ-gena de la mujei generalmente ha sido escrita por mujeres como Rosario Castellanos, Angeles Mastrerta, Elena Garro, entre otras. Herrera verdaderamente ha capturado los tejidos coloridos de un guipil poético de voces, llantos y esperanzas. Se espera que esta colección de poemas se convierta en una contribución sustancial para el mundo lÃ-rico de Hispanoamérica, que más y más va reconociendo la obra diversificada de Juan Felipe Henera. Dolores M. Duran-Cerda Arizona International College The University of Arizona Mexican Consuh and Labor Organizing: Imperial Politics in the American Southwest University of Texas Press, 1999 By Gilbert G. González The primary focus of this fascinating study is directed at examining four separate major agricultural woikeis' strikes rhat took place in Califoinia during the 1930s. Nevertheless, author Gilbert G. González is equally engaged with exploring the reactionary nature of Mexico's supposedly "revolutionary" regime in die decades following the violent overthrow ofthe Porfirian machine. In spite of theii use of radical trappings such as socialist and/or nationalist ihetoric combined with the window dressing provided by mutais that depict peasants engaged in a heroic class struggle, González convincingly argues that the "institutional revolutionaries" who have ruled Mexico for the last seventy years have been anything but radical . In fact, diose same cotporatist oligarchs have made a science out of repeatedly maneuvering domestic laboring dasses away from anarchist and/ oi Marxist expressions of proletarian solidarity. Further, Gonzalez's study of four strikes carried out by Chicano agricultural woikers and their families in Depression-era California demonstrates how Mexico managed to export through appointed consuls its program of thinly disguised kboi conservatism in order to aid U.S. agro-indusrry in its shameless exploitation of imported woikers. One...

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