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1 Introducción En este libro analizo cómo se manifiesta el orientalismo en varios discursos modernistas hispanoamericanos. En el contexto de este estudio, por “orientalismo” me refiero a las fuentes y aproximaciones al Lejano Oriente en diversos géneros, relatos de viaje, cuentos, poesía, crónicas y ensayos. A propósito, he decidido enfocar mi estudio exclusivamente en el Lejano Oriente y en particular en China, Corea, India, Japón, Singapur, Sri Lanka y Vietnam no sólo porque se trata de una vasta región sino porque los textos de los que aquí me ocupo repetidamente hacen alusión a esos lugares. Por lo tanto, el “orientalismo” en este libro difiere radicalmente de aquél que Edward Said cuestiona en su Orientalism sobre las representaciones de los discursos anglo-franceses en el Medio Oriente.1 A través de lecturas detenidas de varios textos modernistas, muestro en primer lugar, cómo son las representaciones de sujetos orientales en los relatos de viaje de aquella época finisecular. En segundo, indago cómo se construyen diferentes presentaciones elaboradas por escritores que no viajaron al Oriente y que se inspiraron únicamente en textos literarios, históricos, de arte, y en artefactos culturales como la pintura, la alfarería y la escultura . Este estudio gira en torno a textos escritos por los siguientes miembros del movimiento modernista: Arturo Ambrogi, Rubén Darío, Julián del Casal, Enrique Gómez Carrillo, Efrén Rebolledo, José Martí y José Juan Tablada. Ya que, de acuerdo a varios estudios críticos el modernismo hispanoamericano se sitúa aproximadamente de 1888 a 1916, mi análisis de textos tanto primarios como secundarios se concentra en producciones publicadas dentro de ese período.2 Mi selección no es por enmarcar a éstos dentro de un marco temporal subjetivo como lo suelen sugerir fechas convencionales que “fijan la duración” de un movimiento literario sino porque el tema que me ocupa 2 Introducción puede apreciarse en su pleno desarrollo en ese lapso de casi treinta años. Para determinar cómo se produjo un imaginario oriental en aquella época finisecular, me concentro particularmente en dos aspectos: primero en la apreciación/contextualización de artefactos culturales en prosa y poesía; y, segundo, en diversas representaciones orientales que figuran en los relatos de viaje modernistas. Es de suma importancia rescatar las ideas que surgen a partir de un artefacto tomando en cuenta que, la presencia de un artefacto cultural, sus relaciones, contextos, su vitalidad, funciones y asociaciones, concretamente existen mientras éste simultáneamente participa en un espacio discursivo y textual. No hay objeto que exista apartado del mundo , separado de un contexto. La presencia o propiedades de éste son figuradas, catalogadas, imprimidas; su “eficiencia” o funci ón es reproducida en textos; su forma es mostrada en exhibiciones ; su belleza o fealdad, incluso su aura, siempre forma parte de un espacio dialógico y discursivo. Un artefacto inevitablemente radica dentro de cierto contexto. Con esto presente, lo que hay que plantearse es ¿en qué forma se presenta y se percibe el espacio textual donde figura un artefacto oriental, y, cuáles son las correspondencias simbólicas entre texto y contexto en torno a ese artefacto? Dado que la representación física o textual de un objeto elucida una producción de significados y el proceso de transcodi ficación articula diferentes niveles de cierta realidad, lo que cuestiono son las diferentes fricciones que el lenguaje presenta al tratar de reconstruir un artefacto por medio de la palabra. Sin separarme del hecho que el lenguaje, ya sea visual y/o escrito (el signo), tiene una relación ambivalente en torno a su referente,3 lo importante es descifrar el contexto de un artefacto , tomando en cuenta que éste actúa como un “agente” catalizador que reproduce un discurso específico. Es decir, ¿cuáles son los símbolos específicos de los que se vale ese discurso al “apropiarse” de un objeto oriental? O, ¿es que acaso existe una correspondencia, como el antropólogo y crítico del arte David Napier lo sugiere: “specific symbols are at the foundation of our capacity not only to ‘imagine’ the foreign, but to form an ‘image’ of and for ourselves, a correspondence, an absolute likeness, an identity”?4 [18.191.5.239] Project MUSE (2024-04-24 08:38 GMT) 3 Introducción En torno a los relatos de viaje, hay que...

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