Cuando el Cine Chileno Empezó a Hablar: (Tres décadas de cine en Chile 1960-1990)

CUANDO EL CINE CHILENO EMPEZÓ A HABLAR (Tres décadas de cine en Chile 1960-1990) CRISTIAN SÁNCHEZ Pensar en el cine chileno es pensar en los desesperados esfuerzos de un moribundo por prolongar los dudosos éxtasis de la agonía. Salta a la vista que el sujeto no goza de buena salud quizás desde su gestación. Mal constitutivo de esta actividad que acaso sea un espejo de nuestros más encomiables defectos nacionales: en Chile toda fundación reviste el carácter de lo provisional. El "mientras tanto" es el principio único, recurso del método, el s.o.s. del carácter patrio. Contingencia: ¡Cuántos crímenes se cometen en tu nombre! Vacilando entre el último suspiro y el ilusorio relumbrón de la estrella fugaz, el cine chileno se ha estrellado en la ausencia de fundamentos, la improvisaci ón negligente, la pedantería a la moda y los relamidos esfuerzos de un provincianismo cursi y ramplón. En los años sesenta, sin embargo, se vislumbró un cambio de orientación que si bien no irrumpió como un movimiento, significó al menos una puesta al día, un necesario ajuste de cuentas con la realidad. Apareció, en efecto, una mirada menos complaciente que no se detuvo en el clisé de tumo y que en algunos casos fue capaz de zarandear los empolvados mitos de nuestro raquítico imaginario, para dotar de una inusitada potencia expresiva tanto a la lengua hablada como a la soterrada gestualidad del chileno. Por vez primera nuestro cine se reconoció con el país abriéndose al mismo tiempo a movimientos y estéticas de otras latitudes. Me atrevo a sostener que esta renovación partió, en lo fundamental, de dos centros: el instituto fílmico de la Universidad Católica y el Departamento de Cine Experimental de la Universidad de Chile. En el primero, la presencia de Rafael Sánchez fue decisiva, no sólo en todas sus realizaciones documentales: Faro Evangelista y Paralelo 56 resultaban de una rigurosa caligrafía ajena al "modus operandi" de la cinematografía nacional, sino también por su actividad como profesor y divulgador de las grandes teorías del montaje. En Cine Experimental Sergio Bravo realizó una serie de documentales de© 2006-2007 NUEVO TEXTO CRITICO Vol. XIX-XX No. 37-40 196___________________________________________________CRISTIAN SÁNCHEZ gran factura y acabado artístico: Mimbre, Imágenes deAlmahue, Trilla y Banderas del pueblo (1964) resultaron ejemplares como propuesta de un cine de poesía reflexivo. Tanto Sánchez como Bravo, más allá de apreciables diferencias de perfil político, trataban de asumir una postura sistemática frente al lenguaje cinematográfico , sirviéndose para ello de la gran tradición del Cine Soviético, Kulechov, Eisenstein , Pudovkin, fueron asimilados a través de los divulgadores ingleses: Grierson, Rotha y Spottiswoode, en el caso del primero y de manera directa en el segundo. La influencia de las nuevas tendencias del cine directo, la presencia de Joris Ivens, uno de los grandes documentalistas de todos los tiempos que en 1962 realizó A Valparaíso, y la visita del padre del "Cinéma Vérité" Edgard Morin, fueron potentes detonadores para el desarrollo del cine no argumentai. No es de extrañar entonces que el Cine Experimental produjera una gran cantidad de excelentes documentales bajo la firma de Héctor Ríos, Alvaro Ramírez y Pedro Chaskel entre otros. Resultaba evidente que la ansiada renovación del cine chileno tenía que provenir del ámbito universitario y necesariamente a través del género más alejado de la industria y los intereses comerciales: el documental. El cine de ficción, salvo excepciones, seguía prisionero de fórmulas históricas, divorciado de la realidad y del público. Chile Films se mantenía como un persistente símbolo caduco de una sociedad que no deseaba mirar sus contradicciones ni despertar de su letargo, completamente impermeable a los aires renovadores que azotaban el mundo. Los proyectos individuales de Hernán Correa Un viaje a Santiago (1960), y de Naúm Kramarenco Deja que los perros ladren (1960), no obstante estar bien inspirados resultaban una p...