Ese Oscuro Objeto del Deseo

COMENTARIOS SOBRE FILMES_________________________________________125 ESE OSCURO OBJETO DEL DESEO (Luis Buñuel, Cet obscur objet du désir, 1977). La Muerte Cuando vi Ese oscuro objeto... Buñuel no había muerto. No sabía entonces que era su última película. Ahora lo sé, ya no volverá a filmar. Se ha ido, se ha exilado para siempre. Amenos que se le permita un último deseo, levantarse de la tumba por unos instantes para leer el diario y echarun vistazo a la magnífica especie humana. Pequeño deseo que él mismo imaginó en su admirable (libro de memorias) Mi último suspiro. Fuera de esta saludable curiosidad la muerte le parecía perfecta. Desde muy temprano tuvo clara conciencia de ella. Existir para siempre le parecía monstruoso, porque sabía que en esa tentación estaba la ausencia de vida. Buñuel como pocos supojugar con la muerte, con su propia muerte. Cuenta que estando en el hospital y peligrando su vida, un amigo quiso despedirse; él respondió: díganle que ya me morí. Otra humorada: sintiendo que llega el momento fatal Buñuel cita a sus amigos más queridos, todos tan ateos como él. De pronto se abre la puerta y entra un cura, el que procede a darle la extremaunción con su entero beneplácito y el escándalo consiguiente de sus amigos, que maldecirán para siempre su memoria. De este modo la imaginación puede ser entendida como el arte de morir muchas veces, pero sobre todo como el arte de hacer de la muerte un asunto vital. Si la vida es un hacerse contra las determinaciones de la necesidad y a favor de lo posible, es decir de la creación permanente. Si la vida es esa extraña aventura de la singularización en que lo inacabado se resiste a ser cosificado, la inmortalidad (esa no-muerte que dura una eternidad) viene a ser el escamoteo de lo que la vida tiene como más esencial: lo incierto. Por esto la muerte no es lo contrario de la vida, sino su motor, su acicate. "Morir me parece perfecto" dice Buñuel, y Hegel le responde "La muerte es lo más terrible y aceptar su obra es lo que más fortaleza exige". Buñuel fue un hombre valiente porque aceptó el desafío de hacer su muerte con su vida, fue capaz de mirar cara a cara aquello "que a los hombres aterra" (Bataille) y hacerse reconocer libremente por otras conciencias libres. Es esta idea de la soberanía que nos viene de Hegel, la que Buñuel pone en práctica en su moral personal, que no es una maleable ética de bolsillo, sino que emana de un profundo querer ser. Y no es sólo un profundo querer ser, dirá Savater, sino un querer ser lo mejor, lo excelente. Así arriesgar la vida (fabricar su propio morir) por el reconocimiento de lo más alto que es posible ser, es desaparecer, es verdad, más su desaparición es la de un ser humano, una muerte en el sentido estricto del vocablo". "Es en la apuesta, en el desafío de la existencia enfrentada al peligro que el hombre se constituye en tanto que hombre", y así "un ser humano no puede constituirse en tanto que ser humano sino a condición de ser finito y mortal. Un ser humano no puede vivir humanamente sino a condición de realizar su muerte: de tomar conciencia, de soportarla", de ser capaz de afrontarla voluntariamente. Ser hombre para Hegel 126_____________________________________________CRISTIAN SANCHEZ es poder y saber morir. El ser verdadero del hombre es, pues, en última instancia, su muerte, en tanto que fenómeno consciente y así Heidegger podrá decir "que la existencia humana es una vida para la muerte". Ese oscuro objeto del deseo y toda la obra de Buñuel jamás quiso ocultar esta verdad. La Seducción Ese oscuro objeto. . . termina con una violenta explosión en la que presumiblemente mueren los protagonistas: Conchita y Mathieu. Desde un comienzo el filme presenta estos signos de una época convulsionada por la violencia. Un infierno cotidiano. Aparentemente su discurso se...