In lieu of an abstract, here is a brief excerpt of the content:

EL “BOOM” DE LA NOVELA DEL TRUJILLATO EN LOS NOVENTA: OTRA PROLIJIDAD DE LO REAL por Ana Gallego Cuiñas Universidad de Granada EL fenómeno literario del trujillato ha recorrido un itinerario que, desde la muerte del tirano Rafael Leonidas Trujillo, ha ido variando con el paso del tiempo. En las letras dominicanas ha predominado la representación realista de esta experiencia dictatorial y se ha reconstruido, a través de una relación detallada de nombres, tiempos y lugares, verosímilmente un ambiente que es inveros ímil. Este apego a la “prolijidad de lo real” empieza a perder peso en las narraciones que salen a la luz en la década de los noventa, incursionando en una ficción de carácter oblicuo y fragmentario. No obstante, el anclaje en la referencialidad sigue siendo un hecho, aunque los motivos literarios que imperan en estas obras muestran cambios trascendentes en la tematización del trujillato. Por ello, es necesario, y es lo que pretendo hacer en este artículo, señalar las líneas descriptivas y de interpretación que sigue el corpus heterogéneo de novelas de los noventa, y que suponen un viraje sustancial en este discurso literario. Lo primero que hay que tener en consideración es que en este período se suceden una serie de cambios en el ámbito político dominicano (se esfuma Balaguer1 del entarimado político y hay una mejora económica), que también revertirán en el literario, repercutiendo en el trazado de la novelística del trujillato : se incrementa el número de publicaciones y el respaldo editorial. La singular coyuntura política que atraviesa el país en este decenio, como en los anteriores, imprime su huella en la producción novelística del país. ¿Cuál es, entonces, el panorama político dominicano de estos años? En esta etapa asistimos a la dominación totalitaria, la violencia y la represión que han caracterizado la historia política dominicana, pues a los treinta y un años de Trujillo 45 hay que sumarle los veintidós de Balaguer (y su neotrujillismo) en el gobierno . También hay que denunciar la falta de participación de los intelectuales en la escena política, que habrían de defender una práctica social dirigida a las demandas populares, dejando a un lado las posiciones favorables al servicio del poder de turno de algunos o la crítica ácida de otros. EL BOOM DE LA NOVELA DEL TRUJILLATO En efecto, en los noventa se produce una suerte de “boom” de esta novela que lleva a que se publiquen el doble de textos que en años anteriores, y que encontremos importantes innovaciones en el abordaje literario del trujillato: el escritor dominicano en este decenio pretende dar una vuelta de tuerca al tratamiento literario del dictador, hasta la fecha varado en los efectos de la dictadura en el pueblo, esto es, el abuso de poder, el pesimismo derivado de la imposibilidad del cambio, la oposición anónima al régimen, el contingente militar trujillista, etc. Y es que el quisqueyano se asoma ahora (y no en los setenta, como ya hicieron las novelas del dictador del resto de Latinoamérica) a los balcones de la conciencia del tirano aun a riesgo de humanizarlo, y se precipita a saldar las cuentas pendientes con ese pasado indeleble. Esto no significa que se dejen a un lado los enfoques y motivos que se desplegaron desde los años sesenta, pues ciertamente siguen estando presentes, sino que hay un acercamiento tácito a la figura de Trujillo, que aparece como protagonista en varias de estas novelas, y a la narración de las múltiples irisaciones de las “verdades ” del trujillato anteriormente silenciadas, como la fecunda vida sexual de Trujillo y su “relación” con las dominicanas. En 1990 no se publica ninguna novela de autor dominicano; las causas las registra Miguel Collado: Indudablemente que la crisis, más bien el caos, que azotó a nuestro país durante casi todo el año de 1990 fue un factor determinante en el descenso significativo de las publicaciones, pues el elevado costo...

pdf

Share