Al lector

AL LECTOR¿PARA qué otra revista?, preguntaba el profesor Alva V . Ebersole, Jr. a los lectores del primer número de Hispanófila en septiembre de 1957. Parte de la respuesta está en los cincuenta y dos años que han pasado desde que él fundara esta publicación, los treinta y dos que trabajó como su director, y los ciento cincuenta y siete números aparecidos sin interrupción desde entonces. Otra parte de la respuesta está en la carta que don Ramón Menéndez Pidal enviara a Ebersole animándole en el inicio de la tarea: “Es de esperar que el entusiasmo y la juventud con que Vds. acometen esta empresa de arduo trabajo científico, produzca rica cosecha de investigaciones que en las páginas de Hispanófila vayan aclarando tantos y tantos problemas como de continuo surgen en la ling üística y en la literatura española”. Sin embargo, la respuesta más contundente a la pregunta de Ebersole son los cientos de artículos con los que académicos , jóvenes los unos y experimentados los otros, han colaborado por cinco décadas. La respuesta, la razón y el objetivo de Hispanófila – tres y uno al mismo tiempo – son claros y sencillos: una revista para dilucidar lo complejo, para producir debate de avanzada, para enriquecer el conocimiento de las letras luso-hispánicas. En ese sentido, Hispanófila, hoy en 2009, es la misma que hace medio siglo. Sin embargo, en muchos sentidos más, esta revista es el resultado de constante cambio y de constante renovación. De eso son testigos los muchos números que han traído en sus páginas interpretaciones novedosas, temas inéditos de las literaturas emergentes, u opiniones atrevidas que luego se han convertido en moneda corriente de la discusión académica. Críticos acreditados han iniciado su camino en estos pliegos, y eso nos honra. También nos da alegría que muchos que ya han obtenido renombre vuelvan a visitarnos porque piensan en Hispanófila como una revista cuidada y seria que conjuga tradición e innovación. En el inicio de los siguientes cincuenta años esperamos, y seguimos invitando, tal como lo hiciera Ebersole en el primer número, la colaboraci ón de las nuevas generaciones de hispanófilas e hispanófilos de todas las latitudes . Hispanófila tiene su casa en la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill desde 1968. En este número especial, preparado por Fred Clark, Frank 3 Domínguez y Juan Carlos González-Espitia, la casa ha querido celebrar a su manera el año quincuagésimo invitando a los profesores del departamento a compartir con nuestros lectores, como un homenaje a la labor de Alva V . Ebersole , lo último de sus trabajos. La revista también celebra el naciente ciclo con una nueva cubierta que busca reflejar los años por venir, sin dejar de lado la poderosa presencia de nuestra raigambre. En unión de ustedes deseamos muchos más números de Hispanófila para producir “rica cosecha de investigaciones ”. FRED CLARK. Director JUAN CARLOS GONZÁLEZ-ESPITIA. Director asociado 4 Al lector ...