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  • La imaginación domesticada:Colectivo Todoazen

"Las palabras tienen dueño," dijo el gato y tenía razón.Véase sino lo sucedido con la palabra "compromiso," durante años adosada a la tradición de la izquierda intelectual y que con los cambios en la correlación de fuerzas acabarían por ser abandonada cuando no estigmatizada. Palabra que hoy vemos reaparecer en el titular de una noticia económica: El nuevo presidente de Seat, el británico James Muir, aupado al cargo por Volkswagen en septiembre pasado, declara: "Necesitamos a trabajadores comprometidos al máximo." Nace así una nueva situación narrativa para la palabra "compromiso." Y si con este ejemplo descendemos de la categoría (lo laboral) a la anécdota (la declaración) es para explicitar que este proceso de "descendimiento" fue el recurso retórico que elegimos para llevar a cabo la escritura de El año que tampoco hicimos la revolución.

El Colectivo Todoazen es un grupo plural y multidisciplinar que centra su labor en las investigaciones narrativas, con voluntad de encuadrarse en la tradición emancipadora del pensamiento marxista. A modo de referencias instrumentales nuestros trabajos se apoyan en dos núcleos puntos de reflexión iniciales: el concepto de Narración Global desarrollado por C. Bértolo en su artículo La novela del siglo XX (Edit Escuela de Letras, 1992), posteriormente desarrollado en La cena de los notables (Periférica 2000) y las reflexiones de Marsha Witten sobre Narrativa y cultura de la obediencia en el lugar [End Page 139] de trabajo (Narrative and Social Control: Critical Perspectives. Dennis K. Mumby. Sage Publications,1993).

La Narración Global como el conjunto de narraciones lingüísticas en cuyo flujo discurre la vida social, y las narrativas como instrumento de control en el interior de las organizaciones, son las dos ideas motrices sobre las que hemos venido desarrollando hasta el momento nuestro trabajo con unos objetivos concretos: determinar cómo y hasta qué punto las narrativas presentes en cada momento histórico concreto determinan la percepción que los sujetos individuales y colectivos tienen de sí mismos y el analizar las actitudes que de tales percepciones se desprenden, sin que en ningún caso entendamos que sean estas narrativas los únicos elementos que participan en ambas percepciones. Indudablemente otros elementos simbólicos o materiales intervienen con tanto o más peso, sobre todo en el caso de los segundos: salario, situación familiar, posición laboral.

Desde esta perspectiva autorial el texto Contra la suspensión de la mirada crítica de Luís Martín-Cabrera, a quien agradecemos la atención prestada a la novela que hemos publicado, nos da pie para dar cuenta de algunas reflexiones que su lectura nos propone.

Si con ocasión de aquella publicación en 2005 manifestábamos el misterio político que a nuestro entender la novela ponía sobre la mesa: ¿cómo puede ser que en un año en que los beneficios empresariales se acercaron al 25% y los salarios apenas crecieron un 3% no haya explotado la revolución social? Ahora, con la llamada Gran Crisis Financiera del 2008 por el medio, en cuya órbita de estancamiento y acelerado desempleo continuamos atrapados, ¿cómo puede ser que tampoco se estén produciendo alteraciones sociales de peso ni emerjan alternativas desde el mundo del trabajo que es en definitiva, el que está cargando con las consecuencias más negativas? De ahí la necesidad de esas reflexiones sobre la persistencia del conflicto capital/trabajo en la cultura contemporánea española que recoge el subtítulo del texto de Martín-Cabrera.

Un persistir que cualquier mínima exposición de datos económicos—incremento del paro, crecimiento de la morosidad, cifras de embargos hipotecarios, porcentajes de precariedad, etc.—deja en evidencia pero que, adelantamos, más que como un conflicto la sociedad española parece vivirlo como simple preocupación o problema, sin concederle, nos atreveríamos a afirmar, especial gravedad al menos hasta estos momentos y casi asumiéndola como una catástrofe inevitable.

Aun sin querer presentarnos como adivinos—a toro pasado—e indicar que aquellos vientos...

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